Esperando...

Hace unos días me daba cuenta de la triste realidad.
Quizá solo sea en mi caso, pero creo que hablo en nombre de muchos de nosotros. Vivimos a expensas, o, más que a expensas, esperando ferviéntemente algo o a alguien.
"La semana que viene mi primo a verme"
"En un mes me voy de viaje a Barcelona!"
"El jueves tengo una entrevista decisiva..."
¿Os suena todo eso? Si no lo hace, podeis dejar de leer en este punto. Pero si lo hace, seguid aqui conmigo...

¿No os parece triste? Siempre estamos esperando. Siempre esperamos. Y mientras, el tiempo pasa a una velocidad vertiginosa...
Ni nos damos cuenta de que nuestro alrededor cambia, nuestros hijos crecen, nuestros padres envejecen, la gente deja nuestro lado, viene gente nueva...
¿Y dónde estamos nosotros? Esperando a que venga mi novio... ¡Viene en una semana!

Me negué a esto desde el principio. Me he negado a tantas cosas que he acabado haciendo... Tengo el estómago más que revuelto. Está atortillado solo de pensar en que mi vida no es como me gustaría. Pero no puede remediarse.

Cuántas veces nos hemos mirado al espejo y hemos odiado el reflejo que nos devuelve... No somos lo suficientemente buenos... o quizá si, pero nos ciega nuestro alrededor, las personas y acontecimientos que viven y acaecen cerca nuestro...
Es tristísimo, lo es de verdad... Toda la gente que vive más a gusto la vida de los demás mientras la suya se desvanece....

No quiero estar aqui, no quiero hacerlo ni un minuto más. Pero no importa lo que quiera hacer, porque tengo tanto miedo a dejarlo todo ahora que simplemente perderé 3 meses de mi vida teniendo claro que cuando vaya alli habré perdido también una de las cosas más importantes ahora...

Perdemos el tiempo constantemente... Por mucho que lo aprovechemos hasta que llegan ésas fechas... Lo perdemos... Porque, y acabo ya.... ¿Qué esperaríamos si no tuviésemos nada que esperar? ¿Nuestra vida sería igual?
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